Artículos 2014
Técnica única para el manejo de cáncer biliar y de vesícula
Se trata de un procedimiento mínimamente invasivo que puede mejorar la calidad y sobrevida del paciente.
Fecha de publicación: 21/07/14 , Por CN=Acevedo R. Josefina,OU=Área no ADM,OU=Relaciones Públicas,OU=CAS,dc=alemana,dc=cl , Periodista de Clínica Alemana
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La región de La Araucanía tiene la tasa más alta de cáncer de vesícula y vía biliar en Chile, los que son cuatro veces más frecuentes en mujeres, generalmente, mayores de 50 años. El principal factor de riesgo es tener cálculos a la vesícula no tratados.


El problema es que estos tipos de cáncer avanzan silenciosamente y sus señales se manifiestan tarde, por lo que es muy complicado hacer un diagnóstico precoz. Por tal razón, esta patología tiene uno de los peores pronósticos de todos los carcinomas gastrointestinales y hepatobiliares, con una sobrevida que no supera los dos años luego del diagnóstico.

El doctor Marcos Tapia, radiólogo intervencionista de Clínica Alemana Temuco, explica que para el manejo de estos pacientes, la institución cuenta de manera exclusiva en Chile con la técnica mínimamente invasiva denominada braquiterapia de alta tasa endoluminal de vía biliar.

“Generalmente, estos tipos de cáncer no responden a la quimioterapia y la cirugía solo sirve cuando no son invasivos. Actualmente, lo que se hace es tratarlos con drenajes biliares, ya sea endoscópicos o percutáneos, pero sin ninguna acción directa sobre el tumor. Con esta técnica, en cambio, se llega al centro del tumor y a través de un conducto introductor se dan, al menos, dos ciclos de radioterapia de alta tasa, directamente en la lesión”, sostiene.

El especialista agrega que este procedimiento está indicado para administrar radioterapia de alta tasa sobre un tumor de la vía biliar (colangiocarcimona) y en casos de cáncer de vesícula que comprometen la vía biliar provocando obstrucción de esta, que es lo que provoca la ictericia y la falla hepática en el paciente.

Si bien está definido como un tratamiento paliativo que apunta a mejorar la calidad de vida de la persona, ya que le permite estar sin prótesis (sin drenaje), se están evaluando sus beneficios, ya que estos pacientes se someten paralelamente a otras terapias, lo que permite una etapificación dinámica, es decir, poder reevaluarlo, ya que podría disminuir el nivel de gravedad del tumor.

“Se trata de una técnica más precisa que permite llegar al centro del tumor con altas dosis alta de radiación, otorgando la posibilidad de reevaluar al paciente y analizar si se puede someter a una cirugía, siempre que no haya metástasis, lo cual es muy positivo”, destaca.

El procedimiento se realiza una vez, con una hospitalización corta, de uno a dos días. Se lleva a cabo con sedación -no requiere de anestesia general- y tiene bajo riesgo de sangrado. Luego, al paciente se le reaplica la dosis dos veces más, lo que se hace de manera ambulatoria, cada siete días.